Creciendo suavemente
Cómo el interés compuesto puede ayudarte a crecer en tu negocio de psicología.
Se que os tenemos acostumbrados a recibir esta newsletter los domingos, pero hoy me he tomado la libertad de retrasarla un día. ¿La razón? Pues os cuento el secreto: la Feria de Málaga y el Crusader Kings 3 (un videojuego de estrategia muy top al que me he enganchado después de viajar por el norte de España y aprender sobre su historia).
Pero no os preocupéis, porque ya se acabaron mis vacaciones y vengo a contaros mis pensamientos sobre desarrollo de negocios, ¡vamos al lio! ✌️
Porque lo importante no es cuando ni cómo, sino hacerlo.
Podría haberme ahorrado la newsletter esta semana, pero cualquier proyecto, incluso los más personales, acaban siendo afectados por un concepto financiero muy útil: el interés compuesto.
El interés compuesto se refiere al efecto de reinvertir los beneficios obtenidos de una inversión inicial, de forma que se generan nuevos beneficios sobre el capital acumulado. Es decir, se trata de obtener intereses sobre intereses, lo que hace que el crecimiento sea exponencial a largo plazo.
Ahora hagamos que se entienda mejor.
El concepto de interés compuesto se puede aplicar al desarrollo de un proyecto, especialmente en el ámbito de la psicología, donde la confianza y la reputación son claves para atraer y fidelizar clientes.
Si quieres crear un negocio exitoso y sostenible, debes pensar en el interés compuesto como tu aliado.
¿Qué significa esto? Significa que debes hacer algo cada día para mejorar tu negocio, aunque no sea grande ni a tiempo (como nosotros enviando tarde esta newsletter), lo importante es que hagas algo.
Ya sea escribir un artículo en tu blog, publicar un vídeo en TikTok o Reels, enviar un correo electrónico a tus seguidores, hacer una llamada a un cliente, asistir a un evento de Psicoflix, etc.
Cada una de estas acciones puede parecer insignificante por si sola, pero si las haces de forma constante y con calidad, se irán sumando y multiplicando con el tiempo. Así es como se crea el interés compuesto: haciendo pequeñas cosas que generan grandes resultados a largo plazo.
Otro ejemplo de cómo funciona el interés compuesto en la psicología es el boca a boca.
El boca a boca es una de las formas más efectivas y económicas de conseguir clientes, ya que se basa en la recomendación de personas satisfechas con tu servicio. Sin embargo, esto no se produce de la noche a la mañana, sino que requiere tiempo y paciencia.
Se lo expliqué a una amiga estas vacaciones cuando me dijo: ‘ya he recomendado a Fulanita 4 o 5 veces, le he salido rentable’.
Imagínate que empiezas tu negocio con 10 clientes. Si haces un buen trabajo, es probable que cada una o cada uno te recomiende a 1 persona más. Así al cabo de un mes tendrás 20 clientes.
Si sigues haciendo tu trabajo bien con esos 20 clientes, cada uno o cada una te recomendará a otra persona, por lo que al cabo de dos meses tendrás 40 clientes. Y así sucesivamente.
Si extrapolásemos este proceso a un año, verás que pasas de 10 a 1280 clientes, solo por el efecto del boca a boca. Esto es lo que se llama el interés compuesto: cada cliente nuevo que consigues te genera más clientes potenciales, lo que hace que tu negocio crezca de forma exponencial.
Por supuesto, este ejemplo es ultra-mega-hiper simplificado y no tiene en cuenta otros factores (no te van a recomendar las 10 personas, no todos las personas recomendadas se convierten en clientes, no te recomiendan al mismo tiempo, etc.). Pero sirve para ilustrar la idea de que el interés compuesto es una fuerza poderosa que debes aprovechar.
La clave está en ser paciente y perseverante, y no desanimarse por los resultados inmediatos.
Recuera que estas cosas tardan en manifestarse, pero cuando lo hace es imparable. Por eso, te animo a que hagas algo cada día para mejorar tu negocio en el mundo de la psicología, aunque no sea enorme ni en el momento exacto, pero que hagas algo.
Así se siembran las semillas del éxito futuro.
¡Nos leemos la semana que viene!
Sigo conquistando Castilla y León en Crusader Kings 3, un abrazo.